Acepta el dilema de San Valentín: nadar en el mar del romanticismo o zambullirte en la piscina de la risa. Opta por lo segundo con estas divertidas tarjetas de San Valentín, cada una de ellas una joya única que promete hacerles reír. **Advertencia: Se requiere sentido del humor.
Te quiero, Bebe

Deleita a cualquier aficionado a Schitt’s Creek con esta encantadora tarjeta de Moira Rose, un poco menos teatral que la Moira Rose real pero rebosante de encanto.
¡Dick Pic!

Déjate llevar por la fantasía: opta por una encantadora tarjeta con el bebé Yoda, o toma un camino más atrevido con un vibrante garabato abstracto. La decisión es tuya, pero ten en cuenta que lo que a ti te parece encantador (el bebé Yoda) puede no compararse con lo que a ellos les hace realmente cosquillas (dibujos extravagantes).
Es cosa de Michael Scott

Experimenta el encanto de Michael Scott, un personaje que encarna la confianza en sí mismo y busca la aprobación de las formas más hilarantes. Esta tarjeta de felicitación es imprescindible para los fans incondicionales de The Office o para cualquiera que tenga un sentido del humor juguetón. No es sólo una tarjeta; ¡es una celebración del encanto engreído!
Dilo con Bernie

¿Te preguntas cómo hacer especial el día de San Valentín de un entusiasta de Bernie? Sorpréndele con una entrañable ilustración de Bernie, especialmente una con esos icónicos mitones. Puede que tú tengas su corazón, pero Bernie tiene su espíritu, y no hay nada más atractivo que un hombre que aboga por la sanidad universal.
Reality Check

¿Navegando por los reinos del realismo en el amor? Esta tarjeta, impregnada de la sabiduría de Dwight Schrute, es tu compañera perfecta. También es una tarjeta ideal para felicitar a tu mejor amigo el Día de San Valentín.